023. 6/17 op.7 "意志は鋭し、刃は鈍し"

Para otros términos de 6/17, véase 6/17 (desambiguación).

023. 6/17 op.7 "意志は鋭し、刃は鈍し"
Saga	Saga del Shinigami Sustituto
Kanji	意志は鋭し、刃は鈍し
Romaji	Ishi wa surudoshi、yaiba wa kobushi
Volumen	Memories In The Rain
Cronología
Anterior	022. 6/17 op.6 "BATTLE ON GRAVEYARD"
Siguiente	024. 6/17 op.8 "All One Way Sympathies"

6/17 op.7 "意志は鋭し、刃は鈍し" (, , Ishi wa surudoshi、yaiba wa kobushi ^?, traducido como Claras intenciones, fácil filo) es el capítulo 23 del manga de Bleach.

El intenso combate entre Ichigo Kurosaki y Grand Fisher llega a su punto culminante cuando el segundo hace que su cebo tome el aspecto de la madre del primero, la difunta Masaki Kurosaki, a la que mató seis años atrás. Pero no sólo los fantasmas del pasado llegan hasta Ichigo en aquellos momentos, ya que también Rukia Kuchiki se encuentra dividida, pues no sabe si debe ir a ayudar a su amigo o mantenerse al margen: sólo unas palabras que oyó hace mucho tiempo harán que tome una firme decisión.

Portada

Este capítulo no cuenta con una portada propiamente dicha, sino que en su segunda página se ha dejado espacio para mostrar el logotipo de la serie y el título del capítulo, algo que se vuelve más frecuente a medida que progresa la serie. La página está compuesta por dos grandes viñetas, bajo las cuales aparecen los elementos ya señalados, el logotipo y el título. En la primera de ellas, que ocupa poco más de la mitad de la página, se ve a Grand Fisher esbozando un gesto de profunda malicia al mostrarle a Ichigo el cebo con el aspecto de su difunta madre, Masaki. En la segunda viñeta, sensiblemente más pequeña que la primera, tan sólo se ve parte del rostro de Ichigo Kurosaki de perfil, mirando sorprendido la escena a la vez que su enemigo se ríe cruelmente de él.

Sinopsis

Después de soltar una malévola risita, Grand Fisher le pregunta a Ichigo si está sorprendido, y pasa a explicarle cómo ha podido transformar el aspecto de su cebo hasta que se igual a Masaki Kurosaki. Reconoce que no recuerda lo que ocurrió hace seis años, pero que de todas formas podría saber qué fibras sensibles tocar con tan sólo ver la cara de Ichigo. La mano con la que le atacó anteriormente, abriéndole heridas en el pecho y los hombros era la izquierda, con la cual puede rastrear en la memoria y los recuerdos de su enemigo, hasta dar con un punto débil del que aprovecharse, mientras que con la mano derecha puede crear un cebo similar a lo que ha visto en lo más profundo de su oponente. Según Grand Fisher, hasta el más duro y poderoso de los Shinigamis tiene a un ser querido al que no haría daño jamás, y precisamente gracias a esto ha podido eludir a los Shinigami durante tanto tiempo y salir airoso de los combates en los que se ha llegado a ver implicado. La persona a la que Ichigo jamás podría hacer daño no podría ser otra que su madre, y como tal la ha elegido, logrando una fidelidad tal que puede incluso imitar su voz al hablar por la boca de su cebo, llamando a Ichigo por su nombre y sorprendiendo aún más al alarmado Ichigo.

Rukia se acerca al lugar de la lucha a toda velocidad. Sólo unos minutos antes, Kon le había preguntado si acaso no iba a ir a ayudar a Ichigo y ella le había respondido que no podía hacerlo, ya que le había dicho de una forma tajante y que no admitía réplicas que no interfiriese. Seguidamente, Kon le preguntó si, siendo Grand Fisher un Hollow tan fuerte no correría peligro la vida de Ichigo, ante lo cual Rukia tan sólo contestó que no lo sabía, mientras mantenía la mirada baja y seguía apoyada en el tronco de un árbol, como si el asunto no fuese con ella. Entonces Kon, en una impropia actitud seria y preocupada, le pidió que fuese y salvase a Ichigo, llegando a arrodillarse ante la sorpresa de Rukia. Ésta trató de detenerlo, pero Kon se mantuvo en sus trece, diciéndole que si Ichigo muriese, él también tendría un gran problema, ya que debería quedarse en su cuerpo para siempre y se vería obligado a vivir con una familia tan singular como son los Kurosaki. Rukia acabó aceptando ante la alegría infinita de Kon, y se marchó a toda prisa, tal y como se la vio antes, después de haberle dicho a Kon que siguiese velando el descanso de las hermanas de Ichigo.

Sin dejar de correr, Rukia se recrimina silenciosamente que esté yendo hacia allí sin saber aún qué hacer exactamente, ya que comprende que los remordimientos y unos injustos sentimientos de culpabilidad han conducido a Ichigo a la posición a la que se encuentra en esos instantes y que es la primera vez desde que se convirtió en Shinigami que está luchando por sí mismo. Si ganase con su ayuda, ¿podría sentirse feliz y satisfecho? Rukia llega por fin a un desnivel, desde el cual ve unos metros por debajo suyo a Ichigo encarándose con Grand Fisher y, al ver cómo sangra su amigo, empiezan a sacudirle unos temblores, de tal forma que se fuerza a sí misma a no moverse y acudir en auxilio del Shinigami sustituto. Una voz del pasado resuena en su mente y le recuerda algo que había quedado impreso de forma indeleble en su memoria: existen dos tipos de lucha, aquéllas en las que se busca proteger la vida y aquéllas en las que lo que desea proteger es el orgullo. Si ahora ayudase a Ichigo, sí podría salvarle la vida, pero no su orgullo, la razón por la que él está peleando con Grand Fisher. Agarrándose el brazo, y musitando como una letanía que no debe interferir, Rukia finalmente opta por mantenerse a la expectativa, después de pedirle en voz baja a Ichigo que no se muera.

Grand Fisher atraviesa a Ichigo

Contraataque de Ichigo

De nuevo, Grand Fisher señala la debilidad de Ichigo, que se queda paralizado con tan sólo oír su nombre de los labios de lo que parece ser su madre. Ichigo le responde con una explosión de ira, lanzándose a él con su Zanpaku-tō en todo lo alto y gritándole que ése no es el lugar adecuado para tomar el aspecto de Masaki. Sin embargo, su embate se ve de súbito interrumpido al aparecer en su dirección el cebo de Grand Fisher que, con la voz de Masaki, le pide a Ichigo que baje su espada y no le haga daño. El tiempo que Ichigo se queda sin reaccionar le da tiempo más que suficiente a Grand Fisher para atravesar tanto al cebo como al Shinigami sustituto con una enorme púa. El terrible Hollow ya da por concluido el combate, burlándose de Ichigo, al que no duda en calificar como el peor Shinigami con el que ha llegado a enfrentarse. Mas sus carcajadas son interrumpidas de improvisto por Ichigo, que levanta su Zanpakutō e impacta contra el cuerpo del Hollow, pese a haber sido atravesado por su enemigo. Manteniéndose ambos inmóviles, Ichigo le señala que, por muy romo que sea el filo de su espada, es más que suficiente para derrotar a alguien como él y, seguidamente, con su Zanpakutō continúa rasgando a su sorprendido enemigo hasta cercenarle parte del cuerpo y derramar una ingente cantidad de sangre.

Personajes

&nbsp Por orden de aparición:

• Kon (en el cuerpo de Ichigo)
• Ichigo Kurosaki
• Grand Fisher
• Masaki Kurosaki (como cebo de Grand Fisher)
• Rukia Kuchiki
• Yuzu Kurosaki
• Karin Kurosaki
• Isshin Kurosaki
• Jūshirō Ukitake (Flashback)

Curiosidades

• Aunque sea en un flashback y no se le llegue a ver más que parte del rostro y la espalda, el Shinigami que habla a Rukia de las luchas por la vida y el orgullo no es otro que Jūshirō Ukitake, el Capitán de la 13ª División. Esta escena sería ampliada mucho tiempo después, en el capítulo 135, aunque también sería corregida, ya que Ukitake llevaría cubriendo los ropajes negros propios de un Shinigami el haori blanco distintivo de su cargo.
• Con esta breve aparición, se puede considerar que Ukitake es el primer Shinigami que llega a aparecer en la serie vestido como tal, con la excepción de Ichigo y de Rukia.